El Camino De Zankh
Nuestra imaginación nos lleva por recovecos impresionantes cada vez que queremos crear una historia singular, diferente a las demás. La fantasía y la realidad se combinan para darnos un producto lleno de personajes que nos parecen entrañables y que, al terminar la historia, no queremos despedirnos de ellos, pues el trabajo que le hemos dedicado ha sido arduo y largo. Pero nuestro resultado es imperecedero porque sobrevive, porque si alguien lo lee, ya ha traspasado el espacio y el tiempo.
En la literatura, conocer mundos fantásticos es cosa diaria. Ya sea que un libro sea llevado al cine y la película termine siendo una majestuosidad en imágenes, o que disfrutemos de la lectura con una imaginación tan vivida que cada recoveco de la historia nos haga sentir que estamos en aquel escenario ficticio. Es por ello que El Camino De Zankh forma parte de estas historias.
Zankh es el príncipe de una familia real, que ha sido una de las más importantes en Galen. Ahora que ya es más grande que hace unos años, decide ir con su maestro Celus a una expedición de una cueva, con ayuda de otro hombre, Dargo. Lo que encuentran en la cueva no sólo es misterio y belleza, también a una estatua que cobra vida y que los perseguirá hasta deshacerse de ellos: Hoggoth. Pero Zankh no sólo es heredero de una línea de sangre real, también será el héroe de la historia. Zankh, príncipe de Jahreen, tendrá una vida complicada los siguientes meses.
Comenzaré hablando de lo más sencillo. Esto es, de la estructura de los párrafos y del uso de signos y la ortografía misma. Desde el inicio, en los primeros párrafos introductorios, vemos una falta de destreza en el uso de los signos, se colocan comas y puntos y comas donde no deberían ir, y algunas oraciones son cortadas donde aun deberían haber más explicación. Todo ello, se arregla con la lectura y con la copia de la estructura lingüística de los textos literarios, por supuesto, al comienzo, después cada uno tiene su propio estilo. Pero es necesario que en un inicio, uno se case con el buen uso de aquellas herramientas.
Aunado al punto anterior, varias palabras están mal escritas, no sé si sea por el procesador de textos que no reconoce los errores ortográficos o por la plataforma de autoedición que tampoco tiene incluido un diccionario o una revisión del texto, pero hay varias palabras que no están bien escritas y dificultan, en su momento, una óptima lectura. La revisión y el uso de esta ortografía también vendrá con la lectura y la escritura diaria.
Entrando en temas mayores, la historia es muy buena, la idea mucho mejor, y el planteamiento de un príncipe que debe aprender a cuidar a los que lo rodean, que tiene pérdidas y que lucha para mantener el orden en su hogar, quizá no sea novedoso, pero resulta bien realizado en esta historia. El crecimiento del personaje se ve claramente pues en la primera parte el propio Dargo se sorprende cada vez que Zankh hace algo "bueno", algo que les ayuda. Parecerá muy explícito, pero funciona perfectamente.
Como dije, la pérdida que sufre por la muerte de sus dos compañeros a manos de un ser maligno, lo hace sufrir y darse cuenta que la vida no siempre es fácil, y que será uno de los que protejan a su hogar. Tanto que, después de darse cuenta de la naturaleza de Hoggoth, decide destruirlo él mismo.
El libro me parece interesante, pero tras la poca estructura del texto, disminuye la calidad. Además, deja la sensación de que esta historia (como bien lo dice el subtítulo) es sólo una más de todas las que se pueden contar de Galen. Como si fuera sólo la introducción a un mundo fantástico lleno de héroes y villanos. Si el autor logra manejar bien los estilos, dejar a un lado los párrafos que ni sirven y darle más detalle a los personajes y no tanto a la descripción, será un gran universo.
La historia extra llamada «Okukan» es interesante, pero no porque sea buena, sino porque su significado se siente más como un prólogo para una segunda obra que como un relato corto en sí mismo. Y vaya prólogo que es, una épica batalla se avecina.
Como dije, la pérdida que sufre por la muerte de sus dos compañeros a manos de un ser maligno, lo hace sufrir y darse cuenta que la vida no siempre es fácil, y que será uno de los que protejan a su hogar. Tanto que, después de darse cuenta de la naturaleza de Hoggoth, decide destruirlo él mismo.
El libro me parece interesante, pero tras la poca estructura del texto, disminuye la calidad. Además, deja la sensación de que esta historia (como bien lo dice el subtítulo) es sólo una más de todas las que se pueden contar de Galen. Como si fuera sólo la introducción a un mundo fantástico lleno de héroes y villanos. Si el autor logra manejar bien los estilos, dejar a un lado los párrafos que ni sirven y darle más detalle a los personajes y no tanto a la descripción, será un gran universo.
La historia extra llamada «Okukan» es interesante, pero no porque sea buena, sino porque su significado se siente más como un prólogo para una segunda obra que como un relato corto en sí mismo. Y vaya prólogo que es, una épica batalla se avecina.
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Título Original: El Camino De Zankh. Una Historia De Galen
Autor: A. J. Ito
Ilustraciones: J. L. Vilarasau
Año: Julio, 2018
ASIN: B07FS88YMD
Páginas: 223 (Electrónico)
Editorial: Autopublicado en Amazon
Calificación: 5/10
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