Antigua Vida Mía

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Es difícil entender la vida de las mujeres cuando se es hombre, pero gracias a los magníficos textos que ellas nos comparten dándonos su visión acerca del mundo y de sus vidas (en específico éstos, ya que también hay obras acerca de mujeres escritas por hombres y que también son muy buenas). Es asombroso ver su punto de vista, leer su vida narrada, los significados que le dan a sus experiencias, y así nos damos cuenta qué estamos haciendo bien y qué estamos haciendo mal con ellas.
Gracias a los textos en forma de confesión podemos adentrarnos a la vida de las mujeres, para conocer el sentido de sus vidas conforme a su alrededor, en el contacto con su familia, amigos, pareja o hijos. Gracias a estos textos podemos entender los sentimientos que a veces no nos comparte y que son aquellos que comienzan a carcomerlas por dentro.
Esto es lo que nos cuenta Marcela Serrano en su novela Antigua Vida Mía.
SINOPSIS La vida de Josefa da un vuelco inimaginable cuando su amiga de la infancia, y aún en la adultez, Violeta, ha sufrido un revés en su vida. Para tratar de ayudarla y de evitar que la prensa se haga de las cosas privadas de Violeta, decide hacer caso a lo que le dijo su amiga y tomar los cuadernos en donde escribía sus mas profundos pensamientos. Al ver la dificultad en la que se encuentra, decide leer sus escritos y así, de una manera personal, entiende por lo que ha pasado, hasta la última decisión. Josefa nos contará su vida, pero también nos contará la de Violeta a través de sus textos. La vida de las dos, unidas y ahora en un grave problema.
La novela es una belleza por donde se mire, y eso que la hemos leído despacio, tratando de entender cada una de las referencias que hay a nivel político, nacional, internacional, generacional y feminista. No se trata, tampoco, de hacer ver que es una historia específica para las mujeres, sino que es de mujeres para todos los lectores, sin importar género, sexo, etc.
Desde su comienzo se ve una intriga que va desarrollándose poco a poco, porque no se queda de única manera en ella, sino que a través de pequeñas anécdotas, junto con los extractos de los cuadernos, vamos conociendo a las dos protagonistas por separado y, lo más importante, la vida que las dos crearon al unirse con una amistad desbordada. Tampoco hay que creer que hay una historia de amor entre ellas por su cercanía, es más un amor filial. Por supuesto, escrito en los 90's, con una historia de los 60-90's, siempre existirá un debate sobre ello, pero no es así, aquí.
Esta faceta de crear todo una descripción de la etapa chilena de mediados de siglo hasta finales, es fantástica. Siendo un mexicano el que lo dice, me hace sentir que el país estaba en un gran bache, pero que, a pesar de las desavenencias geopolíticas, cada familia hacía lo mejor por que sus hijos salieran adelante, porque fueran mejor que ellos. Una máxima que todos pensamos.
Pero las cosas no acaban ahí ya que, siendo un par de retratos personales, de mujeres que crecieron en situaciones de contradicciones en varios niveles, luchando por su identidad nacional, esforzándose por ser alguien, también vemos sus sufrimientos a flor de piel, los sentimos nuestros. La lucha por ser mejor, el encuentro de la esperanza y la desesperanza, la relación de pareja, el amor, el odio y el rencor (hacia alguien más y hacia uno mismo), los lamentos y las acciones para dejar de sentirse así. Eso es lo que hace a la novela un poco feminista, que ellas son las que toman la batuta para dejar de ser lo que creían ser, para convertirse en lo que quieren ser, aunque para eso hayan de sufrir un poco más. La libertad tiene un espacio de dolor.
Al final, el hecho de que sean las estrellas que son no hacen mucho cambio a la historia porque se trata más sobre lo que son, mujeres, que o que hacen. La virtud de conectar la historia con Violeta Parra, con varias ciudades del continente Americano y algunas de Europa, los adversidades superadas, todo lo que toca, es fantástico.

• FICHA TÉCNICA •
Título Original: Antigua Vida Mía
Autor: Marcela Serrano
Año: 1995
ISBN: 968-19-0265-3
Páginas: 376

FRASES
• ¿No te das cuenta de que la civilización y la norma son lo único que nos impide comernos vivos? No entiendo como tu puedes tener todavía esperanzas en el futuro y la evolución de esta especie.
• Sin memoria no somos nada.
• El cinismo funciona como una droga para distanciarse, un analgésico para no sentir el peligro de existir, hasta que te envenena. Al principio, no cabe duda, te alivió: pudiste burlarte de tus temores. Pero al final te ha intoxicado.
Una mujer es la historia de sus actos y pensamientos, de sus células y neuronas, de sus heridas y entusiasmos, de sus amores y desamores. Una mujer es inevitablemente la historia de su vientre, de las semillas que en el fecundaron, o no lo hicieron, o dejaron de hacerlo, y del momento aquel, el único en que se es diosa. Una mujer es la historia de lo pequeño, lo trivial, lo cotidiano, la suma de lo callado. Una mujer es siempre la historia de muchos hombres. Una mujer es la historia de su pueblo y de su raza. Y es la historia de sus raíces y de su origen, de cada mujer que fue alimentada por la anterior para que ella naciera: una mujer es la historia de su sangre.
Pero también es la historia de una conciencia y de sus luchas interiores. También una mujer es la historia de su utopía.
Calificación: 9.5/10

¿Será porque las principales protagonistas son dos mujeres, que en este filme abundan los parlamentos? Sin duda la frase podría ser catalogada como prejuiciosa pero eso no invalida el hecho de que en la película de Olivera, sobre la novela de Marcela Serrano, se dicen un montón de cosas que bien podrían mostrarse en imágenes. ¿Será por la famosa practicidad femenina que el filme tiene escenas tan funcionales que se convierten en inverosímiles?

También suena a prejuicio lo de la mentada practicidad y además, pequeño gran detalle, el hacedor de las imágenes es Héctor Olivera, que es varón; pero eso no invalida el hecho de que ya en la primera escena de Antigua Vida Mía, una mujer (A. Belén), que en teoría es una famosa cantante, ingresa a la escena de un crimen sin ser advertida, en el mismísimo momento en que la policía se lleva a la presunta culpable (C. Roth) en medio de una maraña de periodistas y agentes controlando; y curiosamente, cuando un policía finalmente repara en la famosa, esta salva la situación con un autógrafo. Ni en el cine todo sale tan a pedir de boca.
También es práctica en exceso la aparición de un revolver en el cajón de la cómoda de un dormitorio, con la misma naturalidad con que uno encontraría un par de medias o una caja de preservativos. Más teniendo en cuenta que estamos en un ambiente de cantantes, arquitectos y escritores; no de matones. Esta practicidad, que utiliza desmesuradamente las elipsis o da demasiado por hecho o entendido, atenta contra el filme de Olivera, pero hay más.
Los personajes de esta película sobrellevan una regularidad que sin duda abrumará a los espectadores. Todos son espíritus conflictuados, todos son hipócritas y esconden su interior hasta de sus más íntimos; además de ser bastante detestables sus carácteres, los personajes tienen pocas cuotas de humanidad. Alcohólicos unos, adúlteros otros, egoístas a ultranza otros. No se redime ninguno. Si los seres humanos somos tan malos, tal vez no merezcamos ni una película.

Opinión de Gustavo Camps, tomada de:
http://www.canalok.com/cine/peliculas/antiguavidamia.htm

• FICHA TÉCNICA •
Título Original: Antigua Vida Mía
Estreno: 3 de Mayo del 2001 [Argentina]. 14 de Junio del 2001 [Chile]. 15 de Febrero del 2002 [España].
Reparto: Ceciia Roth. Ana Belén. Juan Leyrado. Jorge Marrale. Alfredo Casero. Odiseo Bichir. Cristi Cobar. Diana Lamas. Daniel Valenzuela.
Director: Héctor Olivera
Género: Drama. Romance.

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